Obesidad, un desequilibrio que podemos prevenir
La obesidad es un desequilibrio que podemos evitar si tenemos algunas recomendaciones en cuenta. Cada año durante el mes de marzo recordamos que la obesidad es una pandemia y uno de los principales factores que aumentan la tasa de mortalidad de la población a causa de una enfermedad. Aquí te contamos de qué se trata y cómo manejarla a partir de hábitos sanos de alimentación, en caso de que tú o alguien cercano la padezca o esté presentando algún síntoma.
La obesidad es el incremento en el porcentaje de grasa corporal
Generalmente acompañado de un aumento evidente de peso, ocasionado por el desequilibrio entre una ingesta superior al gasto energético, que condiciona la salud del individuo y afecta su bienestar físico y psicosocial.
Tipos de obesidad y su impacto en el Índice de Masa Corporal
El IMC (Índice de Masa Corporal) es la cantidad de tejido adiposo y muscular, agua y masa ósea del cuerpo humano, determinada principalmente por la nutrición y la actividad física. Esta composición se altera cuando aparece alguno de los siguientes tipos de obesidad.
Obesidad exógena: se produce cuando la ingesta de energía (en forma de calorías) es mayor que el gasto energético del individuo. Está asociada a una dieta rica en grasas y azúcares, combinada con un estilo de vida sedentario.
Obesidad endógena: está influenciada por factores genéticos y hormonales. Las alteraciones en el metabolismo, como en el caso de la resistencia a la insulina o el síndrome de ovario poliquístico, por ejemplo, pueden predisponer a una persona a desarrollarla.
Obesidad metabólica: se caracteriza por desequilibrios hormonales que afectan el metabolismo de las grasas y los carbohidratos. La resistencia a la insulina y el aumento en los niveles de glucosa en sangre son comunes en este grupo.
Obesidad por trastornos alimentarios: como la bulimia nerviosa o el trastorno por atracón, que genera episodios recurrentes de ingesta excesiva de alimentos.
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Las consecuencias del exceso de peso pueden ser, entre otras:
- Enfermedades crónicas
- Problemas musculoesqueléticos
- Impacto psicológico
- Complicaciones durante el embarazo
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Por lo tanto, la obesidad es una enfermedad que requiere una atención integral, desde entender sus causas hasta abordar sus consecuencias. Para esto es fundamental adoptar un enfoque holístico que promueva hábitos de vida saludables y opciones de tratamiento efectivas, que integren una alimentación balanceada y la práctica regular de ejercicio físico para mantener un peso corporal saludable.
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Obesidad un desequilibrio que podemos evitar